Esta puerta mágica se pega al zócalo o a la pared con cualquier adhesivo de doble cara o con blue tack. No se abre, ya que la llave solamente la tiene el ratón Pérez y la utilizará para entrar en el cuarto cuando a los niños se les caiga algún diente y, así, poder dejarles regalos.
Está fabricada con madera reciclada en una taller que da empleo a personas en riesgo de exclusión social.
Mide 10,5cms * 16,5cms.
Transporte incluido en el precio.